La forma más deprimente de hacer que fallezca un animal en el cine es ponerlo a dormir. Durante la película entera nos enamoramos del perrito Marley, y cuando muere por eutanasia solo nos quedó entristecernos más.
Luego de ver por primera vez The Lion King cuando era niña, quedé tan deprimida que no pude volver a mirarla sino hasta después de 10 años. Al pasar la escena donde Simba pierde a su padre, uno de los momentos más tristes de la historia del cine de animación, los divertidos Timón y Pumba lograron ayudarnos a sobrellevar el dolor.
Las películas con animales son las más tiernas… y también las que me ponen más sentimental. Confieso que puedo soportar ver a mi personaje favorito morir y luego seguir con mi vida tranquilamente, pero si llego a ver a un animal morir en escena mi corazón se hace pedazos y me pongo a llorar como bebé.
Estas son algunas de las muertes de animales en las películas que te harán llorar y seguramente no lograrás superarlas.
La muerte de Charlie, y toda la película en sí, expone la cruda realidad del duelo que se experimenta al perder a un ser querido, pero de una manera apta para todas las edades.
Sam es una pastor alemán que siempre está al lado de Neville, su humano. Lo protege y lo despierta cuando tiene pesadillas. Es una de las últimas sobrevivientes al virus K que invade Nueva York en el contexto de la película. Tras defender a Neville de una manada de perros infectados, Sam es mordida por uno y muere. Esta es la parte más triste de la película.
Aslan es una de las figuras más importantes de la saga. Sacrifica su vida para salvar Narnia.
Hedwig es la lechuza y compañera mágica de Harry Potter, fue un regalo que Rubeus Hagrid le hizo en su décimo cumpleaños. La lechuza fue una de las amigas de Harry hasta su muerte, en la batalla de Little Whinging. Una parte de nosotros murió con él.
Esta película marcó la infancia de muchos, principalmente la escena en la que el caballo Artaxmuere al hundirse en el Pantano de la Tristeza. Si esto te puso triste cuando niño, te deprimirá aún más si lo ves como adulto.
La película está basada en la vida del perro Hachiko un akita inu. Ahora, él es símbolo de la fidelidad porque desarrolló un lazo de amor tan fuerte con su dueño, el profesor Ueno, que todos los días, durante dos años, escapaba del jardín solo para acompañarlo y esperarlo en la estación de Shibuya en Tokio, Japón.
Pero un día el maestro sufrió un derrame cerebral mientras trabajaba y jamás regresó a su encuentro con Hachiko a la estación; este lo esperó por 9 años, visitando la estación y haciendo nuevos amigos, hasta que murió de viejo a los 11 años.
Si viste la película y no lloraste, no tienes corazón, y si no la has visto, ¡¿qué esperas?!